Un estudio publicado en la revista médica JAMA Open Network, evidenció los efectos que genera el estrés de la madre en el desarrollo cerebral del feto.

La investigación comprobó que los fetos de las mujeres con niveles más altos de ansiedad, obtuvieron más posibilidades de tener conexiones débiles entre áreas del cerebro que comprometen funciones ejecutivas, cognitivas, emocionales y conductuales.

"Este estudio longitudinal de casos y controles de 140 fetos, incluidos 48 fetos con cardiopatía congénita con 74 imágenes por resonancia magnética y 92 fetos sanos con 149 imágenes por resonancia magnética, mostró que la angustia psicológica en mujeres con cardiopatía congénita fetal parece ser prevalente y asociado con deterioro del desarrollo del cerebro y el hipocampo fetal durante la segunda mitad de la gestación", afirman en el estudio.

Catherine Limperopoulos, autora del estudio, explicó en entrevista con CNN en Español que, “los niveles tóxicos de ansiedad parecen tener efectos directos sobre la forma en que se esculpe y organiza el cerebro fetal en el útero. Lo que está experimentando la futura madre, también lo está viviendo el feto”.

Pero, ¿qué se entiende por "un nivel tóxico de ansiedad"? Según definen en la investigación, se refiere a niveles de estrés "que podrían interferir con la capacidad de una mujer para llevar a cabo sus quehaceres diarios, pero no lo suficientemente fuerte para ser declarado como una enfermedad o trastorno de salud mental".

En esta misma línea explican que, "el estrés produce que la pituitaria y las glándulas suprarrenales llenen nuestro cuerpo con hormonas de escape. Estas hormonas están destinadas a usarse en caso de que exista un peligro extremo y por consecuencia, la necesidad de huir o luchar. Cabe recalcar que estas sustancias químicas que incluyen la hormona del estrés, tienen la capacidad de cruzar la barrera placentaria entre mamá y bebé".

A raíz de esto, advierten que en contexto de pandemia, el estrés es un factor de riesgo para los fetos de mujeres embarazadas. Limperopoulos, explica que el nivel de estrés se ha triplicado durante este año. 

“Hay otros estudios publicados que confirman que las mujeres embarazadas están reportando niveles muy altos de estrés durante la pandemia. Es realmente importante que alertemos a las mujeres sobre el hecho de que los altos niveles de estrés pueden tener un efecto en el desarrollo de su bebé. También, dirigirlas a recursos que pueden ayudarlas a manejar mejor su estrés durante esta pandemia y después”, enfatiza.

Estrés y embarazo 

Usualmente, las patologías mentales como la ansiedad, depresión y estrés en madres embarazadas, repercuten en los hijos durante su desarrollo a través de problemas emocionales, sociales y de comportamiento.

La científica publicó un estudio similar sobre el efecto del estrés en la bioquímica cerebral y en el crecimiento del hipocampo de un bebé. Además de afectar el área de aprendizaje, también influye sobre la formación de recuerdos y la memoria. El estrés también se vincula con el nacimiento prematuro, ya que las mujeres que se sienten más abrumadas durante sus últimos meses de embarazo, tienden a concebir a sus hijos más temprano, según el estudio anterior.

Otro factor que puede verse afectado y se reflejó en el estudio, es el ADN. El estrés materno durante el embarazo puede acortar la longitud de los telómeros del bebé. Estas estructuras compuestas de ADN, están ubicadas en las puntas de nuestros cromosomas, y tienen la labor de proteger las células del envejecimiento. Los telómeros acortados están relacionados con un riesgo peligroso de enfermedades cardíacas, cánceres y muerte prematura. 

Una de las conclusiones primordiales que deja el estudio, es que los elementos riesgosos como el estrés, la ansiedad y la depresión, son modificables. No obstante, Limperopoulos menciona que “el 75% de las mujeres que experimentan problemas de salud mental durante el embarazo pasan desapercibidas porque no hacemos exámenes sistemáticos de estos problemas. Realmente debemos prestar atención a los problemas de salud mental durante el embarazo”.

Revisa el estudio en este LINK.