Candace Pert, psicofarmacóloga: “reprimir las emociones es perjudicial a la salud”

Candace Pert es una psicofarmacóloga reconocida por el descubrimiento del receptor opiáceo en el año 1973, lo que significó el punta pie inicial de hallazgos de diferentes receptores y neurotransmisores. Sus estudios han sido fundamentales para el desarrollo de un nuevo campo de la salud denominado psiconeuroinmunología, que implica la comunicación que existe entre mente y cuerpo, y donde se destaca el rol esencial de las emociones como conector entre estas dos partes. 

La profesional comenta en entrevista con el sitio "RelaxyCalma" que "la mayoría de los psicólogos tratan la mente separada del cuerpo. Inversamente, los médicos tratan al cuerpo como desvinculado de la mente y las emociones. Pero el cuerpo y la mente no están separados y no podemos tratar ni entender a uno sin el otro. Investigaciones científicas están demostrando que el cuerpo puede y debe ser curado a través de la mente, y la mente puede y debe ser curada a través del cuerpo ".

Ante la pregunta: ¿a qué se refiere cuando afirma que su trabajo y el de otros científicos significa un gran cambio de paradigma en la medicina y la fisiología? Pert explica que, “la mente, las ideas y las emociones afectan a nuestras moléculas, a nuestra salud física, mucho más de lo que se creía. Durante mucho tiempo, el concepto de la medicina psicosomática no se tomó muy en serio, e incluso se ridiculizó”. No obstante el trabajo de la científica, en fusión con el conocimiento de otros profesionales del área, demostró que las emociones son en realidad las moléculas que regirían toda la fisiología.

La autora del libro "Molecules of Emotion" explicó además cómo afectan las emociones a nuestras células y en qué proporción.

“Todas las moléculas poseen un aspecto vibracional y otro de partícula o fisiológico. Evidentemente actúan en los dos planos. En el plano fisiológico, las moléculas de las emociones se desplazan por el cuerpo y encajan en los receptores de las células tal y como una llave encajaría en su cerradura. Cuando esto ocurre, producen un cambio en la célula. Lo magnífico y sorprendente es que estas moléculas de las emociones afectan a todas las células del cuerpo”.

Cuando se habla sobre la conexión entre cuerpo y mente y el impacto que tiene sobre las enfermedades, la profesional explica que todas las patologías poseen aspectos psicológicos, no son solo de carácter físico. “Es imposible separar lo físico de lo mental. Por ejemplo, y aunque parezca sorprendente, las personas perciben lo que esperan percibir. Desde el punto de vista anatómico, las moléculas de la emoción se encuentran en las zonas de nuestro cerebro encargadas de la percepción, y sabemos que nos condicionan según las experiencias previas”. 

En cuanto a las emociones no expresadas, Pert advierte que son nocivas para la salud.

“Hay quien cree que este aprendizaje empieza en la infancia, que debemos enseñar a nuestros hijos a aceptar y comprender sus diferentes emociones. De este modo se sienten cómodos con ellas y, cuando se hacen mayores, las utilizan de otro modo, como indicadores, en lugar de guardárselas”, asegura. 

Candace enfatiza en que reprimir las emociones sería un acto perjudicial a nuestra salud, ya que los sentimientos dirigen todos los sistemas del organismo, las válvulas del corazón, los esfínteres del aparato digestivo y hasta la propia digestión. Si se frenan las emociones, también se reprimen las funciones biológicas del cuerpo, esta energía se replica inevitablemente en el plano físico.

Revisa la entrevista completa en este LINK.