La Calidad de la Educación Chilena… si los padres supieran …

La creencia irrefutable de que la educación es un "bien imprescindible”, “que es la solución a la pobreza e inequidad”, y “que la ausencia de educación es el camino directo a la droga y la delincuencia”, son aseveraciones y creencias peligrosas y con un tino de equivocación, de acuerdo con la evidencia científica.

Una proporción muy alta de padres entrega a sus hijos a establecimientos pensando que les devolverán niños exitosos y emprendedores. Esto se comprobó en un estudio de la UNICEF donde se les pregunta a los niños/as qué es lo importante para sus padres, y más del 90% de ellos respondieron que es el rendimiento, el esfuerzo escolar y la buena conducta. Lo irónico es que los adultos claman a los cuatro vientos que “solo les interesa que sean felices”, “que no sufran”, “que no caigan en conductas de riesgo y/o drogas”, “que sean buenas personas” (encuesta de mi autoría).

Considerando a lo anterior, me gustaría aclarar a los padres (y docentes) algunas evidencias que quizás les haga repensar adonde llevan a sus hijos a ser seres exitosos, educados y respetuoso. 

Seré breve y claro:

  • De acuerdo con un ranking de la OCDE, Chile tiene el nivel más alto de números de horas en clases (36,5 horas): más allá de toda la evidencia que muestra que ese tiempo de “aprendizaje” no logra ningún tipo de aprendizaje significativo, el nivel de estrés tóxico producto del hacinamiento en las salas, es grave.
  • Las notas y el Coeficiente Intelectual (CI) predicen solo un 14% del verdadero éxito de esa persona (acá éxito no es igual a bienes materiales, sino a un sentido de competencia, validación, pasión y orgullo). El 86% estuvo relacionado a lo que llaman las “habilidades blandas” (¡que son más duras que las blandas!). 
  • En cientos de casos, las características “extra-curriculares” de los establecimientos educacionales, tales como el Ciberbullying, Bullying, adicciones, y conductas de riesgo, demuestran que alrededor del 50% de ellos siente miedo al colegio. Lo más paradójico es que la primera razón del miedo NO era el bullying ni las drogas, ni los compañeros, sino los docentes y su sobrecarga de trabajo, y actitudes burlescas a muchos alumnos/as (el 68% de los alumnos refiere que los profesores también las hacen Bullying).

Pero lo más triste de todo, es que toda esta educación como un “bien”, no solo es un lugar infectado de estrés y malestar emocional (donde la mayoría de los alumnos/as refiere odiar estudiar!), sino que destruye el mismo sentido por el que “supuestamente” fue creada: el amor al aprendizaje y el conocimiento. 

Por lo tanto, si los padres quieren realmente la felicidad de sus hijos, entonces infórmense de qué tipo de educación les entregan a los niños en esos lugares “de espacio de éxito” para el futuro.

Felipe Lecannelier A

Doctor en Psicología

IG: @felipelecannelieroficial